El trípode con cabezal giratorio fue reemplazado por la versión bola/cardán de 64 pulgadas.

En general, bastante bien. Se siente resistente, los ajustes son fáciles y rápidos de hacer.
La placa de bloqueo es mejor, es más fácil de colocar en el trípode y, personalmente, he descubierto que (todavía) no se ha deshecho accidentalmente.

Las juntas y cabezal no son metalicos, los hubiera preferido de mejor calidad, aunque es justa por el precio, los tubos son de fibra de carbono. Este es mu segundo tripode que compro de esta marca. La diferencia de alturas implica tambien deferencia de materiales del cabezal y seguros de los tubos.

Este cabezal se utiliza para realizar fotos panorámicas, gracias a este cabezal que se engancha en el tripode se consigue fotografiar paisajes con un gran ángulo sin tener un objetivo gran angular.
El material del cabezal es muy resistente y tiene una textura muy agradable. Las piezas tienen muy buenos sistemas de agarre y dan muy buena sujeción, los acabamos son magníficos.
Respecto al funcionamiento, lo he colocado a un tripode, y enrosca bastante bien.
Se puede mover con facilidad.
He podido hacer magnificas fotografías, recomendado!

Lo que buscaba a un precio muy asequible. De trípode a monopié desenroscando una sola pata, excelente altura con cabezal extensible, inclinable e incluso plegable hacia un lado. Cuando está plegada, se reduce a 40 cm sin el bulto de la cabeza y pesa alrededor de kilo y medio. Antes tenía un Manfrotto de 2 kg y cuando estaba cerrado medía 60 cm. Además, este tiene un gancho bajo la cabeza para aumentar el peso y, por tanto, la estabilidad. Definitivamente muy bueno. Se entrega con bolsa, bandolera y llave allen. Pequeña nota: lleva siempre contigo la llave allen, ya que la cintura del cabezal puede aflojarse, basta con darle media vuelta al tornillo y vuelve a estar estable.

Relación calidad precio, excelente. Sólido y versátil. Muy buen cabezal, colocar la cámara en las diferentes posiciones, se realiza de manera fácil y segura. Encantado con el. Lo uso para una Nikon D 7500

Buen tripode, muchas posibilidades

En su conjunto este trípode es de una factura excelente. Bien construido, con buenos ajustes, robusto, estable, versátil (la columna vertical puede girarse a horizontal y una de las patas se trasforma en un monopie) y plegado ocupa 39 cm de longitud. Además el cabezal con bola de 36 mm de diámetro es de muy buena calidad. Sólo hay un aspecto por el que no lo califico con 5 estrellas y es la placa de montaje rápido del cabezal.He editado la opinión después de utilizarlo durante una semana en un entorno hostil, para añadir la quinta estrella y matizar que aunque la placa de montaje rápido es de plástico (compatible arca-swiss), es de un material parecido a la fibra y aguanta como si nada el peso de una Fuji XT2 con un objetivo 55-200. La única parte algo débil de la placa es el anillo que hace de palomilla para roscarla a la base de la cámara (se nota que flexa al atornillarla). No me parece necesario, por tanto, que sea de fundición de aluminio.A lo anterior se suman detalles de calidad como la funda de protección del cabezal en terciopelo y la funda de transporte para el conjunto, con asas y bandolera, de una calidad muy buena.Si a ello le unimos el precio, resulta una compra absolutamente recomendable.

La verdad que estoy encantado con este trípode. Puedo hacer planos a ras de suelo (cosa que uso mucho en fotos de ríos y similares). El poder convertirlo en monopode me parece muy útil y se hace de forma sencilla, aun que hay que tener cuidado de no perder el tornillo que un el cabezal con el monopode.Es robusto y el cabezal es sensible al movimiento cuando esta suelto, pero muy fijo cuando se aprieta.Me lo volveria a comprar la verdad.Un saludo